Las etiquetas RFID para lavandería están hechas de materiales textiles o de silicona flexibles, duraderos, resistentes al calor e impermeables. Pueden soportar cientos de ciclos de lavado y soportar presiones de hasta 60 bares y, al mismo tiempo, pueden leer señales de etiquetas a largas distancias (varios metros). Estas etiquetas ayudan en el seguimiento y la gestión de inventario, lo que garantiza un procesamiento eficiente y automatizado para operaciones de lavandería a gran escala. Proporcionan una solución de seguimiento discreta para prendas fabricadas y alquiladas. Además, sirven eficazmente a hoteles y otras instalaciones de lavandería comerciales.